El agua que tocamos en los ríos es la postrera de las que se fueron y la primera de las que vendrán; así el día presente.
El aprendizaje nunca agota la mente.
El placer más noble es el júbilo de comprender.
La belleza perece en la vida, pero es inmortal en el arte.
La pintura es poesía muda; la poesía, pintura ciega.
La pintura sobrepasa en excelencia y señorío a la música, porque no muere luego de haber dado a luz sus creaciones como le ocurre a la desventurada música; la pintura, al contrario, prolonga su existencia mostrándonos sobre una superficie simple toda su belleza.
Las amenazas sólo son armas para el amenazado.
Mediocre alumno el que no sobrepase a su maestro.