Estoy convencido de que la mitad de lo que separa a los emprendedores exitosos de los que no triunfan es la perseverancia.
La creatividad brota de encuentros espontáneos y de conversaciones que surgen de la nada. Cuando uno se encuentra con alguien, la primera pregunta es sobre lo que hace y de ahí en adelante se pone en marcha la maquinaria de la creación.
La creatividad simplemente consiste en conectar cosas.