Apocarse es virtud, poder y humildad; dejarse apocar es vileza y delito.
Bien acierta quien sospecha que siempre yerra.
Bien sé a cuántos contradigo, y reconozco los que se han de armar contra mí; mas no fuera yo español si no buscara peligros, despreciándolos antes para vencerlos después.
Dijo la rana al mosquito desde una tinaja: más quiero morir en el vino que vivir en el agua...
Donde hay poca justicia es un peligro tener razón.
El que quisiere tener salud en el cuerpo, procure tenerla en el alma.
La hipocresía exterior, siendo pecado en lo moral, es grande virtud política.
La paciencia es virtud vencedora. La impaciencia es vicio del demonio.
La soberbia nunca baja de donde sube, pero siempre cae de donde subió.
Lo mucho se vuelve poco con desear otro poco más.