Nada es virtud ni pecado, mientras no sea divulgado.
Cuando el hombre es celoso, molesta; cuando no lo es, irrita.
Más vale feo y bueno que guapo y perverso.
Cuando fuiste martillo no tuviste clemencia, ahora que eres yunque, ten paciencia.
Nunca es tarde para bien hacer; haz hoy lo que no hiciste ayer.
Iba en su yegua y preguntaba por ella.
El trabajo y el comer, su medida han de tener.
El hambre me tira pero el orgullo me levanta.
No es oro todo lo que reluce, ni harina lo que blanquea.
Quien aprisa sube, aprisa se hunde